Verrugas en el cuello: por qué salen y qué hacer

Actualizado en octubre 2023

Las verrugas en el cuello son lesiones que pueden surgir por situaciones como miomas blandos, verrugas filiformes, queratosis seborreica o molusco contagioso, por ejemplo.

Dependiendo de la causa de esta afección, las verrugas en el cuello también pueden ir acompañadas de síntomas como picazón, enrojecimiento, hinchazón y dolor en la zona de las lesiones.

Ante la presencia de verrugas en el cuello, se recomienda consultar a un dermatólogo o médico de cabecera, para realizar el diagnóstico e indicar el tratamiento adecuado, el cual puede realizarse con el uso de medicamentos en forma de pomadas o geles que contengan ácido salicílico o ácido láctico, por ejemplo. .

Imagem ilustrativa número 1
Foto de verrugas no pescoço

Por qué salen verrugas en el cuello

Las principales verrugas en el cuello son:

1. Acrocordones

Los acrocordones se caracterizan por pequeñas verrugas en el cuello que pueden crecer rápidamente, no causan síntomas y suelen ser benignas.

La aparición de acrocordones puede estar relacionada con factores genéticos o con resistencia a la insulina, y pueden verse, la mayoría de las veces, en personas con diabetes o síndrome metabólico.

Qué hacer: generalmente, no es necesario ningún tipo de tratamiento para los acrocordones. Sin embargo, en algunos casos, el dermatólogo puede extirparlos en un simple procedimiento quirúrgico o a través de una criocirugía, procedimiento que consiste en aplicarle nitrógeno líquido, haciendo que esta se caiga en 1 semana.

2. Verruga filiforme

La verruga filiforme es un tipo de lesión que hace que las verrugas aparezcan en el cuello con forma de filamentos largos o de dedos, pudiendo aparecer también en los párpados, labios, nariz o barbilla.

Al igual que otro tipo de verrugas, las verrugas filiformes también pueden ser causadas por el virus VPH, transmitiéndose por contacto directo con estas lesiones en zonas de la piel con rasguños, piel seca, uñas encarnadas o heridas, por ejemplo.

Qué hacer: el tratamiento de las verrugas filiformes se puede realizar con el uso de cremas o pomadas a base de ácido acetilsalicílico y/o láctico, los cuales deben ser prescritos por el dermatólogo y aplicarse sobre la verruga.

Además, algunos remedios caseros, como colocar cinta adhesiva, aceite esencial de árbol de té o esmalte de uñas directamente sobre las lesiones, también ayudan a eliminar las verrugas filiformes. Vea otros remedios caseros para eliminar las verrugas.

3. Molusco contagioso

El molusco contagioso es una infección que provoca la aparición en el cuello de pequeñas bolitas redondeadas, del color de la piel o rojas, similares a las verrugas, y pueden causar comezón e inflamarse. Vea cuáles son los síntomas del molusco contagioso.

Qué hacer: el dermatólogo puede recomendar el uso de pomadas, como tretinoína, ácido salicílico o podofilotoxina, así como recomendar crioterapia, curetaje o láser para evitar la transmisión del virus a otras personas, la aparición de nuevas lesiones o incluso por motivos estéticos.

4. Queratosis seborreica

La queratosis seborreica es una lesión benigna de la piel de color marrón o negro, similar en apariencia a las verrugas en el cuello, pudiendo surgir también en la cabeza, pecho o espalda.

Las lesiones de queratosis seborreica son causadas por la multiplicación de queratinocitos inmaduros, que son células presentes en la capa externa de la piel que garantizan la protección, resistencia y elasticidad de la piel, siendo más común en personas mayores de 50 años.

Qué hacer: la queratosis seborreica generalmente no requiere tratamiento. Sin embargo, el dermatólogo puede recomendar la crioterapia o la cauterización química, especialmente en los casos en los que la queratosis seborreica causa comezón, dolor, inflamación o provoca molestias estéticas.

5. Queratoacantoma

El queratoacantoma es un tipo de tumor cutáneo benigno, caracterizado por lesiones parecidas a verrugas que pueden aparecer en el cuello, labios, nariz, cabeza u otra zona más expuesta al sol.

Este tipo de lesión es redonda, rosada o del color de la piel y crece rápidamente hasta formar un bulto con un tapón central de queratina, dándole una apariencia similar a un volcán.

Qué hacer: el tratamiento suele realizarse mediante la escisión quirúrgica del queratoacantoma, que una vez extirpado se envía para su análisis. Además, el médico también puede recomendar un legrado o una cirugía micrográfica.

6. Carcinoma de células escamosas

El carcinoma de células escamosas es un tipo de cáncer que aparece en la capa más superficial de la piel, caracterizándose por lesiones ásperas y dolorosas, similares a las verrugas, pudiendo surgir en el cuello, la cara, los brazos o las piernas.

El carcinoma de células escamosas de la piel se produce principalmente debido a la exposición crónica a la luz solar o al uso frecuente de camas solares, por ejemplo.

Qué hacer: el tratamiento indicado por el médico puede incluir la cirugía de Mohs, que consiste en extirpar la parte visible del tumor; una cirugía de escisión, donde se extirpa todo el tejido canceroso, así como una región alrededor de la lesión o incluso con radioterapia.