Hipo constante: principales causas y qué hacer

Actualizado en abril 2024

El hipo es un espasmo normal del diafragma y de los músculos del tórax, no obstante, cuando se torna constante puede indicar algún tipo de irritación de los nervios frénico y vago que inervan el diafragma, debido a situaciones como reflujo, consumo de bebidas alcohólicas o gaseosas, así como una respiración acelerada, por ejemplo. 

En la mayor parte de los casos, los hipos son inofensivos y pasan en pocos minutos por sí mismos o mediante estímulos como aguantar la respiración, soplar, beber agua fría o hacer gárgaras, por ejemplo; sin embargo, el hipo constante se caracteriza por varios episodios de hipo durante el mismo día o durante varios días seguidos. 

Cuando el hipo se vuelve frecuente, es indispensable investigar la causa, pues puede haber alguna alteración importante a nivel neurológico, a nivel del tracto gastrointestinal o respiratorio, por lo que es necesaria la evaluación médica para determinar mejor la causa e iniciar el tratamiento más adecuado. 

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Causas de hipo constante

Las principales causas del hipo constante incluyen:

  1. Consumo excesivo de bebidas gaseosas, como refrescos y bebidas alcohólicas;
  2. Consumo excesivo de alimentos que pueden aumentar la producción de gases, los cuales dilatan el estómago, como repollo, brócoli, guisantes y arroz integral, por ejemplo. Conozca cuáles son los alimentos que causan gases;
  3. Enfermedades gastrointestinales, como esofagitis, gastroenteritis y reflujo, principalmente, que corresponde a una afección en la que el contenido del estómago se devuelve al esófago, en dirección hacia la boca, lo que causa dolor, inflamación e hipo. Conozca cómo identificar y tratar el reflujo gastroesofágico;
  4. Alteraciones del sistema respiratorio, ya sea por enfermedades como neumonía o por aumento de la frecuencia respiratoria luego de realizar actividad física extenuante, por ejemplo, lo que disminuye la concentración de CO2 en el torrente sanguíneo;
  5. Alteraciones electrolíticas, es decir, trastornos en la concentración de calcio, potasio y sodio en el organismo;
  6. Enfermedades neurológicas que puedan alterar el control de los músculos de la respiración, como tumor cerebral y esclerosis múltiple, por ejemplo. 

Asimismo, el hipo constante puede surgir luego de procedimientos quirúrgicos en la zona del tórax o el abdomen, pues puede ocasionar algún tipo de estimulación o irritación en la región del diafragma. Estas causas están muy relacionadas con el surgimiento de hipo; no obstante, aún no se sabe realmente qué es lo que genera estos espasmos. Conozca otras causas del hipo. 

Qué debe hacer 

Cuando el hipo es constante y no para de forma natural o con métodos que estimulen el nervio vago y aumenten los niveles de CO2 en la sangre, como soplar algo, beber agua fría, aguantar la respiración durante unos segundos o respirar dentro de una bolsa de papel, por ejemplo, es necesario buscar atención médica para que sean identificadas las posibles causas. 

Por lo tanto, los episodios de hipo que duren más de 48 horas deben ser investigados mediante la realización de pruebas como radiografía de tórax, análisis de sangre, tomografía computarizada, resonancia magnética, broncoscopia o endoscopia. Luego de identificada la causa, el médico indicará el tratamiento más adecuado, el cual puede incluir el uso de antibióticos, protectores gástricos o alteraciones en la dieta, por ejemplo, dependiendo de la causa. 

Causas de hipo constante en bebés

El hipo en los bebés es una situación común, pues en este período sus músculos torácicos y el diafragma todavía están desarrollándose y adaptándose; además, es común que el estómago del bebé se llene de aire mientras es amamantado. De esta forma, la presencia de hipo no suele ser preocupante, recomendándose adoptar ciertas medidas que ayuden a que el episodio pase más rápido, como dejar al bebé de pie o sacarle los gases.

Sin embargo, en caso de que el hipo dure más de 24 horas o entorpezca la alimentación, la lactancia o el sueño del bebé, es importante solicitar una evaluación del pediatra, pues podría tratarse de alguna afección más seria, como infecciones o inflamaciones. 

Conozca otros consejos acerca de qué hacer para parar el hipo del bebé. 

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