Los puntos rubí, también llamados angioma rubí o senil o nevus rubí, son pequeños lunares rojos en forma de puntos que aparecen en la piel durante la vida adulta y que pueden aumentar de tamaño y cantidad con el envejecimiento. Es bastante frecuente y no representa riesgo para la salud, no obstante, si existe sangrado, se debe acudir a un dermatólogo para que realice un diagnóstico más preciso.
El angioma senil es un tipo de angioma de piel que normalmente surge en zonas poco visibles, como el cuero cabelludo y espalda, y también puede estar presente en el tronco y en el rostro, pero con menor frecuencia. Es la principal enfermedad de la piel en ancianos y no genera síntomas.
El tratamiento es realizado normalmente con fines estéticos, pudiendo llevarse a cabo mediante un láser o crioterapia. La mejor forma de prevención del angioma rubí es usar filtro solar y evitar la exposición al sol durante mucho tiempo para que no haya envejecimiento precoz de la piel, lo que favorecería al surgimiento del angioma.

Principales características
Los puntos rubí se presentan inicialmente como manchas pequeñas, planas y rojas, las cuales pueden aumentar de tamaño gracias al envejecimiento, pudiendo llegar a los 5 mm y tener coloración rojo brillante. Estas manchas no desaparecen, es decir, sólo pueden ser retiradas con algún tipo de tratamiento, y evolucionan lentamente.
Normalmente, no existen síntomas, sin embargo, en casos donde hubo traumatismo en la región del angioma, puede haber sangrado. De esta forma, es importante acudir al dermatólogo para que sea realizado de nuevo un análisis de los puntos rubí de la piel.
Causas de los puntos de rubí
Aún no se sabe cuál es la causa del surgimiento de angioma senil, sin embargo, entre los factores que pudieran estar relacionados con su desarrollo están: el envejecimiento de la piel, la exposición prolongada al sol y a compuestos químicos y el estrés. Asimismo, personas que sufren diabetes tienen mayores probabilidades de tener puntos rubí y en mayor cantidad.
Cómo es realizado el tratamiento
El tratamiento del angioma rubí normalmente es realizado con fines estéticos y puede ser realizado a través de:
- Láser, que promueve la disminución del flujo de sangre en el vaso, eliminando el angioma;
- Crioterapia, en la cual es colocado un aerosol de nitrógeno líquido sobre la mancha roja;
- Electrocoagulación, es aplicada una corriente eléctrica en el angioma;
- Escleroterapia, que es una técnica en la que es inyectada una sustancia en el vaso sanguíneo para eliminarlo.
El tratamiento de los puntos rubí depende de la cantidad y de la localización, pudiendo estar localizados en el tronco o el cuero cabelludo.
Opciones de tratamiento casero
El tratamiento casero para el angioma senil puede ser realizado con aceite de ricino o con jugo de manzana verde. El aceite de ricino es utilizado para hidratar la piel y debe ser aplicado en la mancha roja una vez al día durante 7 días. La manzana verde posee propiedades antioxidantes, siendo capaz de retardar el envejecimiento de la piel y, de esta forma, evitar el progreso de los puntos rubí. El jugo de manzana verde debe aplicarse en el angioma por lo menos 3 veces al día durante 3 semanas.
Para evitar que los puntos rubí aparezcan en la piel, es importante usar filtro solar, evitar la exposición prolongada al sol, tener una alimentación saludable y tomar baños con agua fría para mejorar la circulación.