Un vello encarnado es cuando un vello crece dentro de la piel en vez de salir en la superficie de esta, lo que provoca inflamación y síntomas como pequeños bultos semejantes a espinillas, comezón y dolor en la zona.
El vello puede encarnarse debido al uso de afeitadoras o a la depilación con cera, pinzas o cremas depiladoras, afectando a hombres y mujeres, y es más común que surja en regiones como el cuello, las ingles, los glúteos y las axilas; no obstante, también puede surgir en la cara, las piernas o la nuca.
Los vellos encarnados pueden tratarse fácilmente aplicando compresas tibias en la zona; sin embargo, si ocurren con frecuencia o los síntomas empeoran, se debe consultar al dermatólogo para que indique el tratamiento más adecuado, que puede ser llevado a cabo mediante el uso de cremas retinoides, de antibióticos o de corticosteroides.
Síntomas de vello encarnado
Los principales síntomas de vello encarnado incluyen:
- Pequeños bultos con o sin pus, semejantes a espinillas;
- Comezón;
- Piel roja, morada o marrón en la región;
- Aumento de la sensibilidad de la región;
- Sensación de ardor;
- Protuberancia dura en la piel.
Los síntomas de vello encarnado pueden surgir en regiones donde los vellos fueron depilados o rasurados, y en ciertos casos, puede surgir una inflamación en el folículo piloso, situación conocida como foliculitis. Vea cómo identificar los síntomas de foliculitis.
Cómo confirmar el diagnóstico
El diagnóstico del vello encarnado es realizado por el dermatólogo a través de la evaluación de los antecedentes de salud y de los síntomas, tomando en cuenta cuándo iniciaron y la frecuencia en la que surgen, cómo es realizada la depilación y cuál es su frecuencia.
Asimismo, el médico debe llevar a cabo un examen físico en el que observe las características de la lesiones en la piel, y en la mayor parte de los casos, no es necesario ningún otro examen para confirmar el diagnóstico.
Posibles causas
El vello encarnado es causado cuando el vello que fue removido comienza a crecer y no rompe la capa de queratina de la piel o no encuentra la salida del folículo piloso, lo que hace que se curve hacia adentro, penetrando en la piel, lo que provoca un proceso inflamatorio.
Los factores que pueden aumentar el riesgo de que surja un vello encarnado incluyen:
- Usar hojillas de rasurar o depilar;
- Hacer depilación con cera;
- Retirar vellos con pinza;
- Tener vellos encrespados, gruesos o ásperos.
Asimismo, el vello encarnado también puede surgir debido al uso de ropas muy apretadas, como pantalones o blusas muy justas, lo que favorece el roce con la piel, forzando al vello a crecer hacia adentro de la misma.
Cómo es realizado el tratamiento
El tratamiento del vello encarnado debe ser realizado bajo orientación del dermatólogo, con el objetivo de promover la salida del vello, reducir la inflamación y prevenir la infección en la zona.
Además, puede ser recomendable realizar exfoliación en la piel con productos indicados por el médico, como retinoides para remover la capa más superficial de la piel, lo que facilita la salida del vello.
En ciertos casos, el médico puede indicar el uso de pomadas para vellos encarnados o de comprimidos, como corticosteroides o antibióticos, para reducir la inflamación o la infección en la zona, o puede remover el vello a través de electrólisis.
Cuando los vellos encarnados surgen con frecuencia, el dermatólogo también puede recomendar la depilación láser, con el objetivo de evitar el surgimiento de esta situación.
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El vello encarnado puede ser removido con el uso de compresas tibias en la zona, durante 10 a 15 minutos por día, para promover la abertura de los poros de la piel y favorecer la salida del vello.
Asimismo, puede ser realizada la exfoliación de la piel 1 o 2 veces por semana, para remover las células muertas, lo que facilita la salida del vello.
Qué se debe evitar
Es importante no exprimir, apretar, arañar, frotar o intentar remover el vello con una pinza o agujas, pues puede causar daños en la piel y favorecer el surgimiento de infecciones, las cuales pueden empeorar los síntomas y hacer que el tratamiento sea más difícil y prolongado.
Además, se debe evitar depilar o rasurar el vello en la región hasta que este salga por la piel.
Cómo prevenir el vello encarnado
Para prevenir los vellos encarnados se recomienda:
- Mantener la piel depilada o rasurada siempre limpia, seca e hidratada;
- Aplicar crema o gel de rasurar u otro producto específico en la región antes de depilar o afeitar los vellos;
- Pasar la hojilla en la dirección de crecimiento de los vellos;
- Lavar la hojilla después de pasarla en la piel;
- Usar máquina de rasurar o depiladora eléctrica;
- Evitar rasurar los vellos siempre que sea posible.
Asimismo, se recomienda evitar el uso de ropa muy apretada, dando preferencia a ropa holgada y de algodón para no irritar la piel.
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