Tener la hemoglobina glicosilada en alrededor del 7 % indica un control aceptable de la diabetes en la mayoría de los casos. Este valor es generalmente el recomendado para ayudar a prevenir complicaciones a largo plazo.
Valores superiores al 7 % aumentan el riesgo de daño en órganos como los riñones, los ojos y el corazón. Por eso, es importante mantener la hemoglobina glicosilada dentro del rango objetivo.
Es importante considerar que este resultado puede variar ligeramente, con un margen de error de hasta 0,5 %. Además, la meta puede ajustarse según la edad, el historial médico o el riesgo de hipoglucemias. Conozca más sobre la hemoglobina glicosilada.
Se recomienda consultar al médico si la hemoglobina glicosilada se mantiene estable o aumenta con el tiempo, ya que podría ser necesario modificar el tratamiento.