Cuando la menstruación dura más de 10 días se considera un sangrado menstrual anormal que puede afectar la salud y aumentar el riesgo de anemia, provocando cansancio, palidez y debilidad.
El sangrado prolongado también puede alterar la rutina diaria y la energía, por lo que la medición de ferritina y otros análisis de sangre ayudan a detectar y corregir la deficiencia de hierro a tiempo.
Entre las causas más comunes se encuentran los miomas, pólipos, alteraciones en la ovulación y trastornos de coagulación, por lo que cada caso requiere evaluación médica para identificar el origen del sangrado y definir el tratamiento adecuado. Conozca más sobre la menstruación prolongada.
Se recomienda acudir al ginecólogo si la menstruación supera los 10 días o es muy abundante, ya que una valoración profesional permite prevenir complicaciones como la anemia severa y garantizar un manejo seguro.