La cerveza tiene, en promedio, entre un 4% y 6% de alcohol, lo que corresponde a unos 12 a 15 gramos en una lata estándar de 355 mililitros. El tipo de cerveza, los ingredientes y el proceso de elaboración pueden cambiar la cantidad de alcohol presente en cada bebida.
El consumo frecuente o en grandes cantidades puede causar molestias como mareos, náuseas o somnolencia, y si se mantiene en el tiempo, aumenta el riesgo de enfermedades del hígado o problemas cardíacos. Vea qué enfermedades puede causar el alcohol.
El contenido de alcohol en la cerveza es mayor en las versiones artesanales y especiales, pudiendo superar el 7% en algunos casos. Por eso, es importante revisar la etiqueta, ya que cada variedad presenta diferencias en su graduación alcohólica.
Si después de consumir cerveza aparecen síntomas intensos, como vómitos persistentes o confusión mental, se debe acudir de inmediato al médico, ya que pueden ser señales de una intoxicación alcohólica.