VSG: valores normales y qué significa que está alta o baja

La VSG es un examen de sangre muy utilizado para detectar alguna inflamación o infección en el organismo, pudiendo indicar desde un simple resfriado o infecciones por bacterias hasta enfermedades inflamatorias, como la artritis o pancreatitis aguda, por ejemplo. 

Este examen, conocido también como Velocidad de Sedimentación Globular, se realiza a partir de la recolección de una muestra de sangre, la cual es procesada y evaluada 1 hora después por el laboratorio. El objetivo es determinar la velocidad con que los glóbulos rojos se separan de la parte líquida de la sangre. 

Cuando el valor de la VSG está alto, se considera indicativo de infección o inflamación, siendo necesario realizar otros examenes, como un hemograma completo y la proteína C reactiva (PCR), para que sea posible identificar con más precisión la causa de la alteración. Vea qué evalua el hemograma

Imagem ilustrativa número 1

Valores normales de la VSG

Los valores normales de la VSG son diferentes para los hombres, mujeres y niños, como se indica en la tabla a continuación: 

  Al cabo de 1 hora Al cabo de 2 horas
Hombres hasta 15 mm hasta 20 mm
Mujeres hasta 20 mm hasta 25 mm
Niños entre 3 y 13 mm entre 3 y 13 mm

Actualmente, los valores del examen VSG en la primera hora son los de mayor importancia, razón por la cual estos son los más utilizados. 

Mientras más intensa es la inflamación, mayor puede ser la elevación de la VSG, por lo que las enfermedades reumáticas y el cáncer pueden causar inflamaciones tan graves que son capaces de aumentar la VSG por encima de 100 mm/h.

Para qué sirve

El examen del VSG es utilizado para identificar o evaluar cualquier tipo de inflamación o infección del cuerpo, ya que mide la velocidad de la separación entre los glóbulos rojos y el plasma, que es la parte líquida de la sangre, por la acción de la gravedad. Por este motivo, cuando hay un proceso inflamatorio en el torrente sanguíneo, se forman proteínas que reducen la viscosidad de la sangre y aceleran la velocidad de sedimentación de los eritrocitos, lo que resulta en una VSG elevada.

De esta forma, la VSG es una prueba muy sensible, ya que puede detectar fácilmente la inflamación, pero no es muy específica, es decir, no puede indicar el tipo, la ubicación o la gravedad de la inflamación o infección que se presenta en el organismo.

Por lo tanto, los niveles de VSG deben ser evaluados por el médico, quien identificará la causa de acuerdo con la evaluación clínica y la realización de otras pruebas, como PCR, que también indica inflamación, o hemograma, por ejemplo. Vea qué es la PCR y qué identifica.

Cómo se realiza

Para realizar el examen de la VSG, el laboratorio tomará una muestra de sangre, que será colocada en un recipiente cerrado y, en seguida, será evaluado cuánto tiempo le toma a los glóbulos rojos separarse del plasma y depositarse en el fondo del recipiente.

Así que, después de 1 o 2 horas, esta sedimentación será medida en milímetros, razón por la cual el resultado es dado en mm/h. Para realizar el examen de VSG, no es necesario ninguna preparación, y estar en ayunas no es obligatorio.

Qué significa el resultado

El resultado de la VSG puede ser indicativo de las situaciones que se mencionan a continuación:

1. VSG alta

Las situaciones que normalmente aumentan la VSG son infecciones virales o bacterianas como, por ejemplo, gripe, sinusitis, amigdalitis, neumonía, infección urinaria o diarrea. Sin embargo, es muy utilizado para evaluar y controlar la evolución de algunas enfermedades que alteran su resultado de forma más significativa, como por ejemplo: 

  • Polimialgia reumática, que es una enfermedad inflamatoria de los músculos;
  • Arteritis temporal, que es una enfermedad inflamatoria de los vasos sanguíneos;
  • Artritis reumatoide, que es una enfermedad inflamatoria de las articulaciones;
  • Vasculitis, que son inflamaciones de la pared de los vasos sanguíneos;
  • Osteomielitis, que es una infección de los huesos;
  • Tuberculosis, que es una enfermedad infecciosa;
  • Cáncer.

Además de esto, es importante recordar que cualquier situación que altere la dilución o la composición de la sangre puede alterar el resultado del examen. Algunos ejemplos son el embarazo, diabetes, obesidad, insuficiencia cardíaca, insuficiencia renal, alcoholismo, alteraciones en la tiroides o anemias. 

2. VSG baja

El examen de de VSG bajo no suele indicar alteraciones. Sin embargo, es importante recordar que existen situaciones que pueden mantener la VSG anormalmente baja y confundir la detección de inflamaciones o infecciones. Algunas de estas situaciones son:

  • La policitemia, también conocida como plétora, poliglobulia o eritrocitosis, que ocurre por el aumento de la cantidad de glóbulos rojos o la disminución del plasma sanguíneo;
  • Leucocitosis severa, que es el aumento de la cantidad de glóbulos blancos en la sangre;
  • Uso de corticosteroides;
  • Hipofibrinogenemia, que es un trastorno hereditario de la coagulación de la sangre, en la que esta no coagula normalmente, pudiendo causar sangrado frecuente;
  • Esferocitosis hereditaria, que es un tipo de anemia que se pasa de los padres para los hijos. 

De esta forma, el médico siempre debe ver el valor del examen VSG y analizarlo de acuerdo con la historia clínica del paciente, ya que no siempre su resultado es compatible con el estado de salud de la persona evaluada. El médico también podrá utilizar exámenes más nuevos y más específicos, como el PCR, que indica de forma más puntual situaciones como infecciones.