¿Cómo vomitar de forma correcta y segura?

Actualizado en enero 2024
Evidencia científica

El vómito es un reflejo natural del organismo para eliminar comida estropeada o sustancias tóxicas que puedan estar en el estómago y, por eso, cuando es realmente necesario, el cuerpo provoca automáticamente el vómito.

Por este motivo, el vómito sólo debe ser inducido cuando exista indicación del médico o cuando se haya comido algo que está causando mucho malestar y que no ha mejorado de ninguna manera.

En situaciones en que alguien ingirió una sustancia venenosa o algún tipo de líquido irritante como productos de limpieza, lo ideal es no provocar el vómito, ya que ese líquido tendrá que volver a pasar por la garganta, pudiendo causar más daños. Lo ideal es que en estas situaciones se acuda inmediatamente al hospital para iniciar el tratamiento más adecuado. Conozca qué hacer en caso de envenenamiento.

Imagem ilustrativa número 1

5 pasos para vomitar de forma segura

Para provocar el vómito correctamente y evitar muchas molestias o complicaciones graves, debe de:

1.  Lavarse bien las manos

Lavarse las manos es siempre muy importante, ya que evita la transmisión de bacterias y otros microorganismos hacia la garganta, previniendo el surgimiento de infecciones como amigdalitis, por ejemplo.

2. Arrodillarse enfrente del retrete

Arrodillarse frente al retrete es una de las posiciones más cómodas y seguras para vomitar, sin embargo, se debe evitar hacer mucha presión sobre la barriga, ya que puede causar aún más molestias.

3. Colocar el dedo en la garganta

Al inicio de la garganta existe un punto que puede ser apretado para producir las ganas de vomitar. Para eso, se debe colocar el dedo dentro de la boca y después hacer una ligera presión en la parte de atrás de la lengua, en la región donde comienza la garganta.

Las ganas de vomitar son casi inmediatas, sin embargo, algunas personas pueden necesitar hacer esta maniobra 2 o 3 veces antes de conseguir vomitar con éxito, ya que el cuerpo puede intentar bloquear la señal las primeras veces.

4. Beber 1 vaso de agua

Después de vomitar es muy importante beber un vaso de agua para remover el exceso de ácido gástrico que queda remanente en las paredes de la garganta y que puede causar pequeñas quemaduras e inflamación.

5. Esperar 30 minutos antes de lavar los dientes

Aunque después de vomitar exista una gran necesidad de eliminar el sabor que queda en la boca, lo mejor es hacer buches con agua, porque el revestimiento de los dientes queda sensible cuando entra en contacto con el contenido del estómago. De esta forma, se debe esperar por lo menos 30 minutos antes de cepillarse los dientes. 

Cómo inducir el vómito de forma segura

Inducir el vómito con cualquiera de los métodos antes mencionados no se recomiendan en caso de sospecha por envenenamiento por químicos. Sin embargo, en caso de síntomas gástricos intensos, como náuseas frecuentes con sudoración fría que surgen después de una comida, la inducción de vómito puede ayudar a aliviarlos.

Algunas formas de inducir el vómito de forma segura son:

1. Usar un dedo

El reflejo de arqueo es una contracción automática de la parte trasera de la garganta que sirve para proteger contra cuerpos extraños o comida que llegó al estómago. Este reflejo puede ser estimulado al tocar la parte trasera de la garganta, detrás de la lengua o en el área de las amígdalas con el dedo, cepillo de dientes o un abatelenguas. La contracción hace que el contenido del estómago suba por la garganta.

2. Hacer gárgaras de forma intensa

Las gárgaras también pueden ayudar a estimular el vómito, sin embargo, estas deben ser lo suficientemente intensas para estimular el reflejo de arqueo y las ganas de vomitar, para que de esta forma el contenido del estómago regrese.

3. Hacer movimientos continuos y rápidos

Hacer movimientos continuos y rápidos puede hacer que algunas personas tengan sensación de malestar, que se produce cuando el cerebro se sobrecarga de información sensorial. Es decir, cuando los ojos ven una imagen, los músculos entienden que los ojos están yendo hacia la dirección opuesta y el oído entiende un cambio en el equilibrio, sin embargo, el cerebro no es capaz de entender todos estos movimientos al mismo tiempo, lo cual causa náusea y vómito.

En este caso, es posible inducir el vómito al correr en círculos o dar giros en una silla giratoria, por ejemplo.

4. Estímulos sensoriales

Algunas personas pueden tener mayor sensibilidad a algunos estímulos que pueden causar vómito. Estos estímulos pueden ser:

  • Auditivos, como escuchar a alguien vomitando;
  • Olfativos, como imaginar el olor del vómito u otro olor fuerte, como alimentos podridos, por ejemplo;
  • Imaginativos, como pensar en el sabor de una comida que no le gusta.

Por ello, a partir de estos estímulos es posible provocar la náusea y el vómito.

5. Solución de sodio

A pesar de que no se recomienda, la solucion de sodio es capaz de provocar irritación en el estómago, causando su contracción e induciendo el vómito. Sin embargo, las soluciones de sodio están asociadas al riesgo aumentado de hipernatremia, que es una situación tóxica que puede poner la vida en riesgo cuando el nivel de sodio está muy alto en la sangre. Conozca qué es la hipernatremia.

Posibles riesgos de inducir el vómito

Uno de los mayores riesgos de vomitar es la posibilidad de desarrollar neumonía. Esto sucede porque cuando se vomita el contenido que está en el estómago regresa hacia la boca y, en ese proceso, puede suceder que un poco de ese contenido sea aspirado hacia los pulmones. En caso de que eso suceda, producirá una inflamación y las bacterias que están en la comida digerida podrán desarrollarse en el pulmón, causando una neumonía. 

Sin embargo, el vómito frecuente también puede causar lesiones en el esófago, como perforación, y en la boca, ya que son lugares con mucosas muy sensibles que no están preparadas para entrar en contacto directo con el ácido gástrico. 

Qué puede causar vómito

Hay situaciones en las que las ganas de vomitar es un signo relacionado a alteraciones en el organismo, estas producen la acción de vomitar de forma involuntaria, como pueden ser:

  • Urgencias abdominales: como apendicitis u obstrucción intestinal;
  • Alteraciones del tubo digestivo: intoxicación alimentaria, úlcera péptica;
  • Alteraciones en el sistema nervioso central: tumores, meningitis, hidrocefalia; 
  • Embarazo:  son frecuentes por las mañanas, y es de los síntomas más conocidos del embarazo, suelen aparecer después de la 6ª semana de gestación y pueden perdurar durante todo el embarazo;
  • Medicamentos: algunos de ellos tienen como efecto adverso el vómito como: antiinflamatorios no esteroideos, digoxina, codeína, colchicina, teofilina, así como los relacionados con la quimioterapia como el cisplatino, dacarbazina y las mostazas nitrogenadas.

Aunque existan algunas situaciones en que se puede inducir el vómito sin grandes riesgos, en caso las ganas de vomitar surjan muy frecuentemente y no mejoren, o sea acompañado de otros signos como vómitos con sangre u olor fétido, es importante acudir al hospital para evaluar la situación. Vea cuáles son las principales causas de vómitos.

Cuándo no provocar el vómito

El vómito nunca debe ser usado como una forma de devolver la comida ingerida del estómago solo porque se comió de más. En caso de que esto suceda con frecuencia, es posible que esté sufriendo de bulimia, un tipo de trastorno alimenticio en el cual la persona se provoca el vómito después de comer para no engordar. Conozca más sobre los principales trastornos alimenticios.

Además, en caso de que se haya ingerido algún producto de limpieza, tampoco se debe vomitar, ya que existe un riesgo muy elevado de causar quemaduras tanto en el estómago como a nivel del esófago. No se recomienda la inducción del vómito en niños sin supervisión de un adulto, así como tampoco en personas que sufran de un trastorno psicológico, como anorexia o bulimia. Conozca más sobre la bulimia.