Es posible tener relaciones sexuales durante el primer mes de embarazo cuando no hay complicaciones, ya que en embarazos sanos la actividad sexual no daña al bebé ni aumenta el riesgo de aborto en esta etapa inicial.
En algunos casos, el deseo sexual puede disminuir por síntomas como náuseas, vómitos, cansancio o sensibilidad en los senos, pero estas molestias son comunes y no significan que exista peligro al mantener relaciones sexuales.
Se recomienda evitar el contacto sexual si se presenta sangrado vaginal, dolor intenso o si el médico indicó reposo u otros cuidados especiales, ya que esto ayuda a reducir el riesgo de complicaciones mientras se realiza una valoración adecuada. Conozca más sobre las relaciones sexuales en el embarazo.
Es importante acudir al ginecólogo de inmediato cuando hay sangrado abundante, ya que puede ser señal de un problema que requiere atención urgente.