La hormona que regula el sueño es la melatonina y es producida por el cerebro para indicar al cuerpo cuándo debe descansar. Su liberación aumenta al anochecer y disminuye durante el día, ayudando a sincronizar el sueño con los ciclos naturales de luz y oscuridad.
La producción de melatonina forma parte del ritmo circadiano, un mecanismo interno que coordina el sueño, la vigilia y otras funciones del organismo. La exposición a la luz solar durante el día reduce su liberación y favorece el estado de alerta.
Con la edad, la producción de melatonina tiende a disminuir, lo que puede provocar insomnio leve o dificultad para dormir, especialmente en personas mayores, para lo cual el médico puede indicar suplementos de melatonina. Conozca más sobre la melatonina.
Se recomienda consultar a un especialista en trastornos del sueño si la dificultad para dormir persiste durante más de dos semanas o si interfiere con las actividades diarias.