Carbonato de litio: para qué sirve, dosis y efectos secundarios

Actualizado en febrero 2024

El carbonato de litio es un medicamento indicado para el tratamiento y el control de episodios de manía en el trastorno bipolar o para ayudar en el tratamiento de depresión, pues actúa directamente en el cerebro, estabilizando el humor.

Este medicamento, conocido también como litio, puede encontrarse en farmacias en forma de tabletas, bajo los nombres comerciales de Carbolit, Theralite o Plenur, por ejemplo, o como genérico bajo la designación de "carbonato de litio", y es vendido únicamente con prescripción médica y retención de la receta por parte de la farmacia.

La dosis y el tiempo de tratamiento con el carbonato de litio dependen de la condición a tratar y de las indicaciones médicas, y no debe ser utilizado durante el embarazo ni por personas que tienen problemas renales o cardiovasculares. 

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Para qué sirve

El carbonato de litio está indicado en el tratamiento y control de episodios de manía en el trastorno bipolar, en la prevención de la manía o de la fase depresiva, y en el tratamiento de hiperactividad psicomotora.

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Asimismo, el litio también puede utilizarse en conjunto con otros medicamentos antidepresivos, para ayudar a tratar la depresión.

En qué dosis tomar

La tableta de carbonato de litio debe ser tomada por vía oral, con un vaso de agua, en los horarios establecidos por el médico.

La dosis de litio depende de la condición a tratar y debe ser indicada por el médico de manera individualizada, siendo necesario realizar exámenes de sangre para medir los niveles de litio en el organismo durante el tratamiento, con la finalidad de evaluar la respuesta al mismo.

Se recomienda beber un mínimo de 1,5 litros de líquido al día durante el tratamiento con litio, además de tener una dieta normal de sal.

Posibles efectos secundarios

Los efectos secundarios más comunes que pueden surgir durante el tratamiento con litio son mareos, temblores en las manos, sed excesiva, náuseas, vómitos, diarrea, ganancia de peso, aumento de tamaño de la tiroides, orina excesiva o pérdida involuntaria de orina.

El carbonato de litio puede causar reacciones alérgicas graves que requieran de atención médica inmediata. Por esta razón, se debe interrumpir el tratamiento y acudir al centro de urgencias más cercano al presentar síntomas como dificultad para respirar, dolor en el pecho, sensación de garganta cerrada, hinchazón en la boca, lengua o cara, o urticaria. Vea cómo identificar los síntomas de reacción alérgica grave.

También se debe buscar atención médica inmediata en caso de que se tome carbonato de litio en dosis mayores de las recomendadas y surjan síntomas de sobredosis, como debilidad o espasmos musculares, somnolencia, sensación de mareo, cambios de humor, visión borrosa, zumbido en el oído, palpitaciones cardíacas, confusión mental, balbuceos, dificultad para respirar o convulsiones.

Contraindicaciones

El carbonato de litio no debe ser empleado por personas con enfermedades renales o cardiovasculares, deshidratación ni por aquellas que usan medicamentos diuréticos.

Además, este medicamento no debe ser utilizado por individuos que sean alérgicos al litio o a cualquier otro componente de la fórmula.

El carbonato de litio no debe ser empleado en el embarazo, pues atraviesa la placenta y puede provocar malformaciones en el feto. Asimismo, el uso del litio durante la lactancia materna tampoco está recomendado.

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