La calculadora de presión arterial es una forma sencilla de evaluar cómo se encuentra la presión sistólica (alta) y diastólica (baja), permitiendo identificar si la tensión se encuentra normal, alta o baja.
La presión arterial es la presión que la sangre ejerce dentro de las grandes arterias del cuerpo y varía según la elasticidad y el tamaño de los vasos sanguíneos y la cantidad de sangre bombeada por el corazón. En los adultos, la presión sistólica normal oscila entre 120 y 129 mmHg y la presión diastólica entre 80 y 84 mmHg. Conozca más sobre la presión arterial.
Para saber si su presión arterial está normal, coloque sus datos en la calculadora a continuación:
¿Qué significa el resultado?
En los adultos, la presión arterial sistólica normal oscila entre 120 y 129 mmHg y/o la presión diastólica entre 80 y 84 mmHg. En los casos donde la presión arterial es inferior a 120 x 80 mmHg, se considera que está normal.
Sin embargo, cuando la presión arterial es inferior a 90 x 60 mmHg, generalmente se clasifica como hipotensión o presión arterial baja.
Por otro lado, la presión arterial se considera alta cuando la presión arterial es superior a 140 x 90 mmHg en adultos y es medida en el consultorio médico o 130 x 80 mmHg cuando es medida en casa.
La presión arterial alta puede indicar la presencia de cambios hormonales, como hipertiroidismo o síndrome de Cushing, o enfermedades renales, como enfermedad renal crónica o riñones poliquísticos, por ejemplo. Conozca los valores de la presión arterial según la edad.
¿Qué puede influir en los resultados?
Algunas situaciones que pueden influir en los resultados de la medición de la presión arterial son:
- Hablar durante la medición;
- Mantener el brazo por debajo del nivel del corazón;
- Cruzar las piernas;
- Tener la vejiga llena;
- No apoyar los pies en el suelo;
- Consumir cafeína o alimentos inmediatamente antes de la medición;
- Fumar antes de medir la presión arterial;
- Practicar actividad física 30 minutos o menos antes de la medición.
Además, el síndrome de la bata blanca, una afección clínica en la que una persona experimenta un aumento de la presión arterial solo durante una cita con el médico o cuando se encuentra en un entorno clínico, también puede influir en los resultados de la medición de la presión arterial.
Qué hacer cuando tienes la presión alta
Cuando la presión es alta, se recomienda relajarse un poco y volver a medir la presión. En ocasiones, la presión arterial puede elevarse, en situaciones como ansiedad, estrés y esfuerzo físico intenso, por ejemplo. Sin embargo, cuando la presión arterial se encuentra alta constantemente puede indicar hipertensión.
Ante la presencia de síntomas, como dificultad para respirar, dolor de cabeza, dolor en el pecho o visión borrosa, o si la presión continúa alta, se recomienda buscar atención de emergencia para una evaluación. Conozca qué hacer cuando la presión está alta.
Qué hacer cuando tu presión arterial está baja
La presión arterial baja, también llamada hipotensión, puede no causar síntomas en algunas personas que ya tienen una presión arterial normal más baja.
Ante la presencia de síntomas como malestar general, mareos, palidez o náuseas, algunas medidas como acostarse con las piernas elevadas por encima de la altura del corazón o beber líquidos, podrían ayudar a reducir las molestias de la hipotensión.
Sin embargo, en casos de desmayo, cuando los síntomas no mejoran a las pocas horas, o incluso si la persona experimenta confusión mental o aumento del ritmo cardíaco, es fundamental acudir al servicio de urgencias más cercano para que se pueda iniciar lo antes posible el tratamiento adecuado.