Los cólicos en el bebé son comunes, sin embargo incómodos, produciendo normalmente dolor abdominal y llanto constante. Los cólicos pueden ser señal de varias situaciones, como ingesta de aire a la hora de comer del seno materno o tomar leche del biberón, consumo de alimentos que producen muchos gases o intolerancia a algún alimento o componente, por ejemplo.
Para aliviar los cólicos, se puede aplicar una compresa de agua tibia en la barriga del bebé, masajear la barriga con movimientos circulares y colocar al bebé para que eructe después de cada comida.
Lea también: Cólicos: qué son, tipos, causas y cómo quitar tuasaude.com/es/colicosEn caso de que los cólicos no pasen, es importante consultar al pediatra para que realice una exploración clínica e indique el tratamiento adecuado que ayude a aliviar los dolores.
Remedios caseros para los cólicos en bebé
Un excelente remedio casero para evitar los cólicos del bebé, que ya no está recibiendo lactancia materna, es darle pequeñas dosis de té de manzanilla e hinojo, ya que estas plantas medicinales poseen propiedades antiespasmódicas que ayudan a aliviar los cólicos y a disminuir la producción de gases.
En los casos donde el bebé esté recibiendo lactancia materna exclusiva, la madre podría ingerir estos tés, debido a que sus propiedades pasan a través de la leche, ayudando a aliviar los cólicos.
Para preparar el té basta colocar 1 cucharadita de manzanilla y otra de anís en una taza de agua hirviendo, dejar enfriar, colar y darle 1 cucharada al bebé antes de comer.
Cómo aliviar los cólicos
Algunas estrategias para aliviar los cólicos en bebés son:
- Masajear la barriguita del bebé con movimientos circulares, en el sentido de las agujas del reloj utilizando aceite infantil o una crema hidratante (como muestra la primera imagen);
- Calentar el abdomen con una bolsa de agua caliente, verificando que no esté muy caliente para evitar quemaduras;
- Con el bebé acostado boca arriba, empujar las piernas en dirección al abdomen de manera que se comprima la barriga, como muestra en la segunda imagen;
- Hacer movimientos de bicicleta con las piernas del bebé;
- Hacer que el bebé eructe después de cada mamada;
- Dar un baño tibio al bebé:
- Amamantar al bebé;
- Colocar al bebé en contacto directo con la piel de uno de sus padres;
- Utilizar medicamentos que estimulen la liberación de los gases como la simeticona, indicado por el médico. Vea un ejemplo de medicamento con simeticona para bebés y cómo usar.
Estas técnicas puede ser usadas en combinación o por separado, hasta que se encuentra la mejor técnica que funcione para aliviar los cólicos del bebé. Cuando el bebé siente cólicos es normal que comienza a llorar intensamente. Por lo que si se encuentra muy irritado es importante calmarlo y solo después es que se deben aplicar las técnicas que se mencionaron anteriormente.
En caso de que el bebé sea alimentado con leche de fórmula, una buena opción es sustituirla por otra leche que no cause tantos cólicos, la cual puede ser enriquecida con probióticos. Sin embargo, antes de decidir sustituir la leche, se debe consultar primero al pediatra, ya que existen muchas alternativas en el mercado. Vea cómo escoger la mejor leche para el bebé.
Causas de cólicos en bebés
La principal causa de cólicos en los bebés es el hecho de que su sistema digestivo se encuentra todavía inmaduro, lo que ocurre hasta los 6 meses; sin embargo, los cólicos también pueden surgir debido a:
1. Ingestión de aire
Normalmente, mientras el bebé succiona, especialmente cuando no se posiciona correctamente al bebé en la mama o no se le da correctamente el biberón o inclusive cuando el bebé llora mucho, aumenta la ingesta de aire, agravando la posibilidad de tener cólicos y, esto ocurre porque el bebé todavía no coordina la respiración con la capacidad de tragar.
Además de esto, si el bebé está con la nariz tapada, debido a que está resfriado, es natural que aumente la cantidad de aire que ingiere, aumentando el riesgo de tener cólicos. Vea cómo amamantar correctamente.
2. Intolerancia a la lactosa
La intolerancia a la lactosa es un problema que causa síntomas como diarrea, dolor abdominal, gases e hinchazón en la barriga, y generalmente surgen de 30 minutos a 2 horas después de ingerir la leche.
Normalmente, la intolerancia a la lactosa surge en niños mayores, adolescentes y en adultos. Sin embargo, es recomendado que si la mujer está amamantando, también debe evitar tomar leche, prefiriendo el yogur o bebidas de origen vegetal, ya que puede provocar gases y cólicos en el bebé.
3. Alergia a la proteína de leche de vaca
La alergia a la proteína de la leche de vaca puede causar cólicos, además de otros síntomas como por ejemplo lesiones en la piel, picazón, vómitos y diarrea, normalmente, el diagnóstico de los casos de alergia a la leche de vaca ocurre en el primer año de vida del niño. Lea también: Cómo saber si el bebé tiene alergia a la leche de vaca.
De esta forma, es importante darle al niño fórmulas hipoalergénicas o no alérgicas, para evitar las alergias y, el único tratamiento para la alergia a la proteína de la leche de vaca es excluir la ingesta de la leche de vaca y sus derivados.
4. Agitación
Los bebés, cuando están expuestos a ambientes ruidosos y agitados, pueden quedar incómodos y con miedo, lo que puede causar cólicos.
5. Alimentación de la madre
La alimentación de la madre puede provocar cólicos en el bebé y es por eso que es importante estar atenta para tratar de identificar los alimentos que le provocan gases al bebé. Algunos de los alimentos más conocidos por provocar este tipo de efectos son:
- Brócolis, coliflor, col de bruselas y algunos otros tipos de vegetales de la familia crucíferas;
- Pimentón, pepino y nabo;
- Granos como los frijoles, ejote o judías verdes, lentejas y guisantes;
- Chocolate.
Generalmente, los mismos alimentos que provocan gases en la madre también son los que provocan en el bebé y para saber cómo el bebé está reaccionando hay que estar atento a algunas señales después de la lactancia, como por ejemplo: barriga hinchada, llanto, irritación o dificultad para dormir. Si estas señales son evidentes, la madre debe reducir la cantidad de alimentos y fraccionar entre las comidas el consumo de estos alimentos, de esta forma podemos aliviar los cólicos en el bebé.
Si mismo así el bebé continúa a presentar cólicos, puede ser necesario dejar de consumir estos alimentos por lo menos en los primeros 3 meses de la lactancia, para después volver a introducirlos más tarde en pequeñas cantidades, probando la reacción del bebé.
Cuándo acudir al pediatra
En la mayoría de los casos, los cólicos del bebé son pasajeros, por lo que no requieren una evaluación médica. Sin embargo, es importante consultar a un pediatra si el bebé continúa muy irritable y no mejora con ninguna medida para aliviar los cólicos.
Además, los bebés mayores de 6 meses que presentan cólicos con más frecuencia también deben ser evaluados por el pediatra, ya que puede ser señal de algún problema de intolerancia.
