11 causas de heridas en la boca, lengua y garganta (y cómo tratarlas)

Actualizado en febrero 2024

Las heridas en la boca, lengua y garganta pueden surgir debido a traumas, como quemaduras por ingerir alimentos o bebidas muy calientes o morderse accidentalmente al masticar, pero también pueden surgir debido al uso de medicamentos, infecciones, como candidiasis oral o leucoplasia o cáncer.

Dependiendo de la causa, las heridas en la boca, lengua y garganta pueden acompañarse de otros síntomas, como hinchazón local, manchas o placas blancas en la boca y dificultad para deglutir, por ejemplo.

Es importante consultar al médico general, dentista o estomatólogo, siempre que surjan estas heridas que no mejoran o que se acompañen de otros síntomas, para que se realice una evaluación, se identifique la causa y se inicie el tratamiento adecuado.

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Principales causas de herida en la lengua

Las principales causas de heridas en la boca, lengua y garganta son:

1. Traumas en la lengua

Algunos traumas como quemaduras causadas por alimentos o bebidas muy calientes o mordeduras en la lengua, pueden causar heridas en la lengua, hinchazón, dolor, malestar, sangrado o incluso, ampollas en caso de quemaduras graves.

Qué hacer: en caso de quemaduras en la lengua, se debe beber agua fría inmediatamente y enjuagar la lengua por algunos minutos, siendo importante consultar al médico general o dentista para que evalúe el grado de la quemadura e indique el tratamiento más adecuado, el cual puede realizarse con analgésicos o antiinflamatorios, por ejemplo. En caso de mordida en la lengua, se puede aplicar hielo o agua fría y consultar al dentista para evaluar si hay algún problema odontológico.

2. Uso de medicamentos

El uso de algunos medicamentos puede provocar una sensación de ardor en la boca como efecto secundario, que normalmente causa mucho dolor en la lengua, paladar, encía, por dentro de las mejillas y en la garganta, pudiendo permanecer durante todo el tratamiento.

Cómo tratar: se debe llevar acompañamiento con el médico que prescribió el tratamiento, ya que se debe interrumpir su uso, por lo que el médico puede evaluar la posibilidad de suspender, cambiar o alterar la dosis del medicamento.

3. Candidiasis oral

La candidiasis oral, también conocida como sapito o algodoncillo, es una infección causada por el hongo llamado Candida albicans, que puede ocurrir en la boca o en la garganta, provocando síntomas como manchas o placas blancas, dolor de garganta, dificultad para tragar y heridas en el borde de la boca.

Esta infección se desarrolla normalmente cuando el sistema inmune está débil, siendo por esto muy frecuente en bebés o personas inmunodeprimidas, como en el caso de SIDA, tratamiento de cáncer, diabetes mellitus o ancianos, por ejemplo.

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Cómo tratar: el tratamiento para la enfermedad del sapito debe ser realizado de acuerdo con la orientación médica, que normalmente indica el uso de un antifúngico en forma de líquido, crema o gel, como a nistatina o miconazol, en la región infectada en la boca.

4. Estomatitis aftosa

La estomatitis aftosa se trata de una enfermedad no contagiosa que causa aftas, ampollas y heridas en la boca más de dos veces por mes. Las aftas aparecen como pequeñas lesiones de color blanca o amarillenta con un borde rojizo, pudiendo surgir en la boca, lengua, en la parte interna de las mejillas, labios, encías y garganta.

Este problema puede surgir debido a la sensibilidad a algún tipo de alimentos, deficiencia de vitamina B12, cambios hormonales, estrés o sistema inmune debilitado. Conozca más sobre las causas y síntomas de la estomatitis aftosa.

Cómo tratar: es importante que el dentista o médico clínico sea consultado para que sea indicado el tratamiento más adecuado, que tiene como objetivo aliviar los síntomas de dolor y malestar y promover la cicatrización de las úlceras. Generalmente, el médico o dentista puede indicar el uso de medicamentos antiinflamatorios, anestésicos, y en algunos casos, antibióticos, pudiendo también recomendar el uso de enjuagues bucales para desinfectar y aliviar el dolor en la región.

5. Herpes labial

El herpes labial es una infección contagiosa causada por un virus que causa lesiones en forma de ampollas o de costras, que aparecen normalmente en los labios, aunque también pueden desarrollarse debajo de la nariz o de la barbilla. Algunos síntomas que pueden manifestarse son hinchazón del labio y surgimiento de úlceras en la lengua y boca, las cuales pueden producir dolor y dificultad para deglutir. Las ampollas del herpes labial pueden estallar, permitiendo que los fluidos contaminen otras regiones.

Cómo tratar: el tratamiento del herpes labial es realizado por el dermatólogo o médico general con el uso de medicamentos antivirales, como aciclovir o valaciclovir, en presentación de pomadas o comprimidos, ya que evitan la multiplicación de virus, permitiendo la cicatrización de la piel, además de evitar el surgimiento de ampollas y heridas. Vea más opciones de tratamiento para el herpes labial.

6. Leucoplasia oral

La leucoplasia oral se caracteriza por la aparición de pequeñas placas blancas que crecen en la lengua, pudiendo aparecer también en el interior de las mejillas o en las encías. Estas manchas normalmente no causa síntomas y desaparecen sin que sea necesario realizar algún tratamiento.

Esta condición puede ser provocada por deficiencias de vitaminas, restauraciones, coronas o dentaduras mal adaptadas, mala higiene oral, uso de cigarrillo o infección por el virus del VIH o Epstein-Barr. Conozca más sobre el tratamiento de la leucoplasia oral.

Cómo tratar: es importante consultar al médico para que evalúe e indique el tratamiento más adecuado, que puede variar de acuerdo con la causa de la leucoplasia. En el caso de que haya sospecha de cáncer de boca, puede ser recomendada por el médico la remoción de las células afectada, a través de una pequeña cirugía o crioterapia. Además, el médico puede prescribir el uso de medicamentos antivirales, como valaciclovir ou valaciclovir o la aplicación de una solución de resina de podofilo y tretinoína, por ejemplo.

7. Xerostomía

La xerostomía, conocida popularmente como boca seca, se caracteriza por la disminución o interrupción de la producción de saliva o alteración en la composición de esta, haciendo que la boca y lengua se resequen, pudiendo causar grietas, úlceras o heridas en la lengua o mucosa de la boca, además de dolor en la lengua.

Generalmente, la herida en la lengua se acompaña de otros síntomas, como saliva espesa o dificultad para masticar y, generalmente, es causada por el fumar, estrés, ansiedad o enfermedades como anemia, lupus o esclerosis múltiple, por ejemplo.

Cómo tratar: es importante beber bastante agua a lo largo del día para hidratar la lengua y las mucosas de la boca y disminuir el malestar de la boca seca, además de evitar fumar. Asimismo, el médico o dentista puede recomendar el uso de saliva artificial o tratamiento específico para la enfermedad que está causando la xerostomía. Vea otras causas de xerostomía y qué hacer.

8. Enfermedad de mano pie boca

La enfermedad de mano pie boca es una enfermedad contagiosa que ocurre con más frecuencia en niños menores de 5 años, causando el surgimiento de heridas o ampollas dolorosas en la lengua, que normalmente se inicia con manchas rojas. Además, las ampollas también pueden surgir en las manos, pies y a veces, en la zona íntima, pudiendo también haber fiebre.

La enfermedad mano pie boca es causada por los virus del grupo Coxsackie, que pueden contagiarse de persona a persona a través de los alimentos u objetos contaminados.

Cómo tratar: se debe consultar al pediatra o al médico general, el cual puede indicar tratamiento con medicamentos para la fiebre\; antiinflamatorios, medicamentos para la comezón y pomadas para las aftas, con el objetivo de aliviar los síntomas. Vea cómo se realiza el tratamiento de la enfermedad mano pie boca.

9. Viruela del mono

La viruela del mono o Monkeypox, es una infección causada por el virus del género Orthopoxvirus, produciendo síntomas, como fiebre, escalofríos, ampollas o heridas en la lengua o boca, las cuales se pueden diseminar en la piel, cualquier parte del cuerpo o genitales. Vea más sobre los síntomas de la viruela del mono.

La viruela del mono puede contagiarse de persona a persona por medio del contacto con secreciones respiratorias, contacto directo con las secreciones de las ampollas y heridas, objetos contaminados o con las lesiones en la zona genital, que también aumentan el riesgo de contagio a través del contacto íntimo.

Cómo tratar: se debe consultar al ginecólogo o infectólogo para confirmar el diagnóstico e indicar el tratamiento con antivirales, como tecovirimat o medicamentos para aliviar los síntomas como paracetamol o dipirona, por ejemplo. Además, el médico debe recomendar aislamiento para evitar el contagio de la enfermedad.

10. VPH en la boca

La infección por VPH en la boca puede causar heridas en la boca, lengua y garganta, especialmente en el borde de la lengua, presentando un aspecto rojo o rosado, pudiendo causar aftas o úlceras en la lengua, además de heridas o verrugas en los labios o cualquier otra superficie de la boca.

El contagio del VPH a la boca puede ocurrir debido a la práctica de sexo oral sin protección, sin embargo, también es posible el contagio a través de un beso, especialmente si hay una lesión en la boca que facilite la entrada del virus.

Cómo tratar: el tratamiento del VPH en la boca debe hacerse con la orientación del médico general o estomatólogo, el cual puede indicar láser, cirugía o medicamentos como ácido tricloroacético o interferón alfa, por ejemplo. Conozca más sobre el tratamiento del VPH en la boca.

11. Cáncer de lengua

El cáncer de lengua puede no causar síntomas en fases iniciales, pero a medida que evoluciona pueden manifestarse algunos, como manchas rojas en la lengua que no mejoran, bolita que no desaparece con el tiempo, sensación de ardor, sangrados, heridas o úlceras en la lengua que no cicatrizan.

Este tipo de cáncer puede ser causado por fumar, consumo excesivo de bebidas alcohólicas o infección por VPH.

Cómo tratar: el tratamiento del cáncer de lengua debe ser realizado con orientación del oncólogo, que puede indicar cirugía, quimioterapia o radioterapia, por ejemplo. Vea cómo se realiza el tratamiento de cáncer de lengua.