El hormigueo en el cuerpo puede ser causado a una mala circulación, al estar sentado, acostado, de pie o en una misma posición durante mucho tiempo. Además, también puede deberse a deficiencias nutricionales, compresión o daño a los nervios, e incluso a condiciones más graves, como un ACV o infarto.
Dependiendo de su causa, el hormigueo en el cuerpo puede estar acompañado de otros síntomas, como dolor, entumecimiento o disminución de la fuerza muscular, dificultad para caminar y coordinar movimientos, cambios en la visión, desmayos, dolor de cabeza, vómitos, dolor en el pecho que se irradia al brazo o palpitaciones del corazón, por ejemplo.
Es importante consultar a un reumatólogo, médico general u ortopedista siempre que aparezcan síntomas de hormigueo o adormecimiento en el cuerpo, especialmente cuando se acompañan de otros síntomas, para que se realicen pruebas que identifiquen la causa y se indique el tratamiento más adecuado. En el caso de un ACV o de un ataque cardíaco, se debe acudir a la emergencia hospitalaria más cercana lo más pronto posible. Vea otras opciones naturales para el tratamiento de hormigueo en el cuerpo.
16 causas de hormigueo en el cuerpo
Las principales causas de hormigueo en el cuerpo son:
1. Mala circulación
Permanecer sentado, acostado o parado en la misma posición por mucho tiempo, principalmente de piernas cruzadas o con un peso sobre el miembro, causa mala circulación y compresión en el nervio local, llevando al surgimiento de hormigueo. Vea los síntomas de mala circulación.
Qué hacer: se debe intentar siempre mover el cuerpo y hacer estiramientos por lo menos 1 vez cada hora, para estimular la circulación sanguinea. Durante el trabajo o viajes largos de avión, es importante hacer pequeñas caminatas por lo menos cada 2 horas, levantándose para ir al baño, beber agua o tomar una taza de café, por ejemplo. Vea otras opciones naturales para la mala circulación.
2. Hernia discal
La hernia discal se produce cuando el disco intervertebral, localizado entre las vértebras de la columna se desplaza, saliendo de su posición correcta; se rompe o termina provocando compresión de los nervios de la zona, y sensación de hormigueo en los brazos o manos, o dolor en el cuello, en caso de hernia discal cervical, o incluso dolor y adormecimiento en la columna, que puede irradiarse a las piernas y dedos de los pies, en caso de hernia de disco lumbar.
Además, pueden surgir síntomas como adormecimiento o disminución de la fuerza muscular. Vea otros síntomas de la hernia discal.
Qué hacer: el tratamiento de la hernia discal debe ser realizado por el ortopedista, el cual puede indicar fisioterapia o el uso de medicamentos analgésicos y antiinflamatorios, como paracetamol o ibuprofeno, para ayudar a aliviar el dolor y disminuir la inflamación. En los casos más graves, el médico puede incluso recomendar la realización de cirugía. Conozca más sobre el tratamiento de la hernia discal.
3. Diabetes
La diabetes provoca mala circulación de la sangre, principalmente en las extremidades del cuerpo como manos y pies, y el entumecimiento en este caso también puede ser una señal del inicio del desarrollo de heridas o úlceras en la región afectada. Conozca cómo identificar los primeros síntomas de diabetes.
Además. la diabetes no controlada puede causar neuropatía diabética, que es una condición que ocurre debido a una exposición prolongada a altos niveles de azúcar en la sangre, dando como resultado daños progresivos en los nervios del cuerpo, surgimiento de síntomas como dolor agudo, sensación de ardor, hormigueo o adormecimiento, pudiendo afectar los brazos, manos o pies. Vea cómo controlar los niveles de azúcar en la sangre.
Qué hacer: el tratamiento debe ser orientado por un endocrinólogo, que puede indicar el uso de medicamentos antidiabéticos, como insulina, para normalizar los niveles de azúcar en la sangre. Además, para aliviar el dolor u hormigueo causado por la neuropatía diabética, el médico puede recetar medicamentos anticonvulsivantes, antidepresivos u opioides, como pregabalina, amitriptilina o tramadol, por ejemplo. Conozca más sobre cómo se realiza el tratamiento de la neuropatía diabética.
4. Síndrome del túnel del carpo
El síndrome del túnel del carpo es una enfermedad que produce compresión del nervio que pasa por la muñeca e inerva la palma de la mano, siendo una de las causas más comunes del hormigueo en los dedos de las manos, además de otros síntomas como dolor en la muñeca, alteración de la sensibilidad, o adormecimiento y sensación de picadas en las manos y dedos, especialmente en el pulgar, índice o dedo medio, y que generalmente se agrava durante la noche.
El síndrome del túnel del carpo se produce debido a movimientos repetidos, como trabajar tecleando o usando herramientas manuales, por ejemplo.
Qué hacer: el tratamiento del síndrome del túnel del carpo debe ser orientado por el ortopedista, el cual puede indicar el uso de una muñequera para inmovilizar la muñeca, especialmente al dormir; hacer algunos ejercicios de estiramiento en las manos; o tomar medicamentos antiinflamatorios o corticoides. Sin embargo, en los casos más graves también puede ser necesario hacer fisioterapia o incluso el médico puede considerar realizar una cirugía. Vea cómo se realiza el tratamiento para el síndrome del túnel del carpo.
Vea en el vídeo a continuación algunos ejercicios que puede realizar para aliviar los síntomas:
5. ACV
El ACV o derrame cerebral, es una condición que puede causar síntomas de hormigueo o adormecimiento en las manos, pies, brazos o piernas, en solo un lado del cuerpo, dificultad para hablar o sonreír, boca torcida y rostro asimétrico. Además, pueden incluso surgir otros síntomas, como alteraciones en la vista, desmayo, dolor de cabeza e incluso vómitos, dependiendo de la zona del cerebro afectada. Vea otros síntomas que pueden indicar un ACV.
El ACV es una situación que puede poner en riesgo la vida y generalmente ocurre debido a una obstrucción de algún vaso sanguíneo en el cerebro, interrumpiendo la circulación de la sangre, o incluso por la rotura de un vaso sanguíneo en el cerebro, que compromete el suministro de oxígeno a este órgano.
Qué hacer: se debe acudir al servicio de urgencias más cercano inmediatamente, para que se realice e tratamiento más adecuado que varía de acuerdo al tipo de ACV, con el objetivo de evitar complicaciones o secuelas, como dificultad para mover el cuerpo, confusión o pérdida de la memoria, por ejemplo.
6. Infarto
El infarto agudo de miocardio, también conocido como ataque cardíaco, consiste en una interrupción del paso de sangre hacia el corazón, causando la muerte de las células cardíacas de esa zona, lo cual genera dolor del lado izquierdo del pecho en forma de opresión, que puede irradiarse al cuello, mandíbula, axila, espalda, brazo izquierdo o incluso, brazo derecho, en forma de sensación de adormecimiento, hormigueo o dolor.
Además, el dolor en el pecho y en el brazo puede acompañarse de otros síntomas, como mareos, malestar, náuseas, sudoración fría o palidez. Vea más sobre los síntomas de infarto.
Qué hacer: ante la presencia de algunos de estos síntomas se debe acudir al hospital de inmediato o llamar al número de emergencia local, especialmente en casos de antecedente de diabetes, presión alta, obesidad y colesterol elevado. De esta forma es posible iniciar el tratamiento lo antes posible, con medicamentos, cateterismo o angioplastia para regular el paso de sangre hacia el corazón y evitar complicaciones.
7. Deficiencia de vitamina B12
La deficiencia de vitamina B12 puede causar daños en los nervios o dificultad para transmitir los impulsos nerviosos, causando hormigueo o sensación de adormecimiento, principalmente en las manos, pies o piernas. Vea otros signos que indicar falta de vitamina B12 en el cuerpo.
Además, también pueden surgir otros síntomas, como dolor muscular, dificultad para concentrarse, diarrea, vómitos o pérdida de peso, por ejemplo.
Qué hacer: se debe consultar al médico general para realizar exámenes, con el objetivo de identificar la deficiencia de vitamina B12, y realizar el tratamiento que generalmente se hace con el uso de suplementos vitamínicos. Además, es importante tener una alimentación variada, consumiendo frutas y vegetales frescos, de acuerdo a la orientación del nutricionista. Vea una lista completa de alimentos ricos en vitamina B12.
8. Esclerosis múltiple
La esclerosis múltiple es una enfermedad autoinmune que lleva a la degradación de la mielina que reviste a las neuronas, comprometiendo el funcionamiento del sistema nervioso y llevando al surgimiento de síntomas como falta de fuerza en los miembros, dificultad para caminar y coordinar los movimientos y adormecimiento u hormigueo de los dedos de las manos, brazos y piernas. Vea cómo identificar los síntomas de esclerosis múltiple.
Qué hacer: el tratamiento de la esclerosis múltiple se realiza con la orientación del reumatólogo que puede indicar el uso de medicamentos anticonvulsivos, corticoides, inmunosupresores, analgésicos y relajantes musculares, que pueden evitar el progreso de la enfermedad y aliviar los síntomas, además de sesiones de fisioterapia.
9. Estrés y ansiedad
El hormigueo en el cuerpo también puede surgir debido al exceso de ansiedad o estrés, que puede afectar las manos, los brazos y la lengua. En algunos trastornos como el trastorno de pánico, este síntoma suele estar acompañado de sudoración fría, palpitaciones y dolor en el pecho o en el vientre.
Qué hacer: en estos casos, se debe buscar un lugar tranquilo, respirar profundamente varias veces, concentrándose para regular la respiración y mejorar la circulación sanguínea. Además, es importante llevar una dieta equilibrada y hacer actividades regularmente como yoga o pilates, los cuales ayudan a aliviar el estrés y la ansiedad. Conozca más cómo controlar la ansiedad y el nerviosismo.
Vea en el siguiente videos algunos consejos para controlar la ansiedad:
10. Síndrome de Guillain-Barré
El síndrome de Guillain-Barré es una enfermedad que afecta al sistema nervioso, causando síntomas como hormigueo o pérdida de la sensibilidad, que normalmente inicia en los pies y va subiendo hasta alcanzar el tronco y los brazos, además de acompañarse de debilidad y dolo en las piernas, pudiendo afectar todo el cuerpo y causar parálisis.
Este síndrome normalmente se produce después de haber tenido una gripe, dengue o Zika, haciendo que el propio sistema inmunológico ataque y destruya nervios, como intento de combatir la infección. Vea quién tiene mayor riesgo de tener síndrome de Guillain-Barré.
Qué hacer: en caso de sospecharse de Guillain-barré, se debe acudir inmediatamente al servicio de urgencias, ya que la enfermedad puede alcanzar los pulmones e impedir la respiración, siendo necesario hacer el tratamiento en el hospital.
11. Uso de algunos medicamentos
Algunos medicamentos pueden causar hormigueo como efecto secundario, algunos ejemplos son medicamentos para quimioterapia, algunos antirretrovirales para tratar el SIDA o el metronidazol.
Qué hacer: debe comunicarse con el médico para evaluar la posibilidad de cambiar la medicación o recibir orientación sobre qué hacer para disminuir los efectos secundarios del medicamento.
12. Consumo excesivo de bebidas alcohólicas
La ingesta constante y en grandes cantidades de alcohol puede causar daños en los nervios situados en las extremidades del cuerpo, causando hormigueo y calambres, principalmente en las manos y pies.
Qué hacer: para aliviar los síntomas se debe detener el consumo de bebidas alcohólicas y acudir con un médico general para aliviar la presencia de otras enfermedades causadas por el exceso de alcohol en el organismo, como problemas en el hígado y piedras en la vesícula.
13. Mordeduras de animales
La mordedura o picadura de algunos animales como perros, gatos, serpientes o arañas puede causar hormigueos en el lugar de la mordedura o picadura. Sin embargo, se debe estar atento al surgimiento de otros síntomas como fiebre, ardor, hinchazón, temblores y pus en la zona, ya que pueden indicar la presencia de infección o enfermedades como la rabia.
Qué hacer: intentar identificar al animal que causó la lesión, lavar bien la región y acudir al médico en caso de que haya sido un animal venenoso, un perro con síntomas de rabia o la aparición de alguno de los síntomas mencionados anteriormente.
14. Fibromialgia
La fibromialgia es una condición neurológica crónica que causa dolor generalizado en todo el cuerpo, aumento de la sensibilidad, dificultad para dormir, cansancio frecuente, dolor de cabeza y mareos, rigidez muscular y adormecimiento u hormigueo en las manos y pies. Vea otras causas de hormigueo en los pies.
Qué hacer: el tratamiento debe ser orientado por el reumatólogo, el cual puede indicar el uso de medicamentos analgésicos o antidepresivos, fisioterapia o ejercicio físico. Conozca más sobre el tratamiento para la fibromialgia.
15. Enfermedad de Lyme
La enfermedad de Lyme es una infección transmitida por la picadura de una garrapata contagiada con la bacteria Borrelia burgdorferi, que puede causar síntomas neurológicos, como adormecimiento en las manos, pies o parálisis de los músculos de la cara, por ejemplo.
Además, puede causar problemas en el corazón, artritis o meningitis. Vea cómo identificar los síntomas de la enfermedad de Lyme.
Qué hacer: el tratamiento de la enfermedad de Lyme se realiza con el uso de antibióticos en forma de comprimidos o inyección en la vena, prescritos por el médico general o infectólogo.
16. Herpes zóster
El herpes zóster es una infección causada por el virus varicela zóster, el mismo que causa la varicela, pues es capaz de permanecer inactivo en el organismo durante muchos años y puede reactivarse cuando el sistema inmunológico se encuentra debilitado.
Esta infección puede provocar hormigueo en todo el cuerpo, especialmente en el pecho y el abdomen, además de otros síntomas como entumecimiento, ampollas y dolor en la zona afectada.
Qué hacer: el tratamiento lo debe indicar un médico general o un neurólogo, el cual suele consistir en el uso de antivirales, como aciclovir, valaciclovir o famciclovir, además de analgésicos o anestésicos tópicos, para aliviar el dolor. Vea cómo se realiza el tratamiento del herpes zóster.
Hormigueo en las manos y brazos
Las manos y los brazos son partes del cuerpo que contienen una gran cantidad de terminaciones nerviosas, motivo por el cual cualquier pequeño cambio puede afectar los nervios y provocar hormigueo.
Las principales causas del hormigueo en las manos y brazos puede ser la migraña, ACV, presión de los nervios que inervan los brazos o el síndrome del túnel carpiano, por ejemplo. Vea cuáles son las principales causas de hormigueo en las manos y brazos y qué hacer.
Hormigueo en las piernas y pies
El hormigueo en las manos y pies pueden ser causado principalmente por estar sentado en una mala posición, por problemas circulatorios, diabetes o la presencia de una hernia discal, por ejemplo.
Es importante consultar al médico en caso de que el hormigueo surja de forma frecuente o esté asociado a otros síntomas, como dolor en la espalda o debilidad. Vea qué puede causar hormigueo en las piernas y pies y qué hacer.
Hormigueo en la cabeza
El hormigueo en la cabeza es común que surja debido a una migraña o al exceso de estrés, las cuales pueden ser aliviadas manteniéndose de reposo. Además, oras situaciones como la sinusitis o la colocación de un implante dental también pueden ocasionar este hormigueo. Vea cuáles son las principales causas de hormigueo en la cabeza y qué hacer.
Hormigueo en el cuero cabelludo
El hormigueo en el cuero cabelludo puede ser causada por la presencia de una irritación en la piel, de hongos en la cabeza o incluso de condiciones más serias, como una dermatitis o la psoriasis. Vea qué hacer para eliminar el hormigueo en el cuero cabelludo.
Hormigueo en la cara
El hormigueo en la cara puede surgir como consecuencia de una parálisis facial, de una crisis de migraña, ansiedad o una disfunción en la articulación temporomandibular (ATM). Conozca cuáles son las causas de hormigueo en la cara.
Hormigueo en la lengua
El hormigueo en la lengua puede ser causada por un posoperatorio de una cirugía dental, debido a que puede haber inflamación o daño de algún nervio; alergias orales, que pueden estar acompañada de picazón en la lengua, después de comer algún alimento específico; una crisis de migraña o la presencia de una afta en la lengua, pudiendo surgir previamente antes de su aparición.
