Los calambres en las piernas es una contracción rápida y voluntaria de uno de los músculos de la pierna, siendo más común que ocurra en la pantorrilla, también conocida como "batata de la pierna", pero también puede aparecer en el músculo delantero o trasero del muslo.
Por lo general, el calambre en la pierna puede surgir debido a la deshidratación, la falta de oxígeno en el músculo o el exceso de ácido láctico debido a la práctica de ejercicio físico intenso o incluso por deficiencias nutricionales.
En la mayoría de los casos, los calambres en la pierna no son graves y pueden aliviarse con estiramientos. Sin embargo, si son frecuentes, ocurren más de una vez al día o tardan más de 10 minutos en desaparecer, se recomienda consultar a un médico general para identificar su causa e iniciar el tratamiento más adecuado.
Por qué dan calambres en las piernas
Las principales causas de calambres en las piernas son:
1. Exceso de actividad física
El exceso de ejercicio físico, como correr o levantar mucho peso con las piernas en el gimnasio, puede llevar a la fatiga muscular, el exceso de ácido láctico y la falta de minerales y oxígeno en el músculo, que se consumieron durante el ejercicio.
Además, la deshidratación o hacer ejercicio en climas muy calurosos puede aumentar el riesgo de calambres en las piernas durante la actividad física, que pueden aparecer durante el ejercicio o incluso algunas horas después.
Qué hacer: debe beber suficiente líquido durante las actividades físicas, además de calentar antes y hacer estiramientos después del entrenamiento, para preparar y recuperar el músculo, evitando su fatiga y la aparición de calambres en las piernas.
2. Mantenerse mucho tiempo de pie
Permanecer mucho tiempo sentado o acostado, en la misma posición, también puede causar calambres en los músculos debido a la falta de movimiento.
Qué hacer: debe cambiar de posición regularmente y evitar estar mucho tiempo sin moverte. Además, si una persona permanece mucho tiempo sentada durante el día, se recomienda hacer pequeñas pausas para levantarse y mover las piernas.
3. Desidratación
La deshidratación puede resultar en una menor cantidad de agua, minerales y electrolitos en el músculo, y causar calambres en las piernas.
Por lo general, la deshidratación ocurre cuando se está en un ambiente muy caluroso, se suda durante mucho tiempo o debido al uso de medicamentos diuréticos, por ejemplo.
Otros síntomas de deshidratación incluyen boca seca, sensación de sed frecuente, disminución en la cantidad de orina y fatiga. Vea cuáles son los síntomas de deshidratación.
Qué hacer: debe mantener el cuerpo hidratado, bebiendo al menos 2 litros de agua al día, especialmente durante actividades físicas y días calurosos.
4. Deficiencias nutricionales
Algunas deficiencias nutricionales, como la falta de vitaminas del complejo B, vitamina D o de minerales como magnesio, calcio, sodio o potasio, por ejemplo, pueden causar calambres en las piernas, que pueden surgir repentinamente o durante el día, sin ninguna causa aparente.
Qué hacer: debe consultar a un nutriólogo o nutricionista para evaluar el tipo de deficiencia nutricional y así ser orientado sobre la reposición de estas vitaminas o minerales a través de la suplementación y una alimentación equilibrada y rica en nutrientes.
5. Embarazo
Durante el embarazo, especialmente al final de la gestación, es común que aparezcan calambres en las piernas, tobillos o pies, principalmente por la mañana.
Estos calambres ocurren debido a las alteraciones hormonales normales del embarazo y a la disminución de la circulación sanguínea en las piernas debido a la compresión de los vasos y arterias de la pelvis por el peso del útero.
Qué hacer: masajear o estirar suavemente la pantorrilla, realizando movimientos con los pies, llevando el talón hacia abajo y los dedos del pie hacia arriba, o aplicar compresas calientes en las piernas, pies o tobillos.
Además, es importante mantener el cuerpo hidratado, bebiendo alrededor de 2 litros de agua al día, así como aumentar el consumo de alimentos ricos en magnesio y tomar suplementos con calcio, magnesio o vitamina B, siempre que sean recomendados por el obstetra.
Lea también: 32 alimentos con magnesio (¡incluye tabla!) tuasaude.com/es/alimentos-con-magnesio6. Efectos secundarios de medicamentos
Algunos medicamentos, como los diuréticos para la presión arterial alta o problemas cardíacos, aumentan la eliminación de agua y electrolitos del cuerpo, lo que favorece la aparición de calambres en las piernas u otros músculos.
Además, los calambres son un efecto secundario muy común de las estatinas, que son medicamentos para reducir el colesterol. Vea qué son las estatinas.
Qué hacer: debe consultar al médico responsable del tratamiento para reevaluar la medicación, pudiendo ajustar la dosis o el medicamento. En ningún caso debe interrumpir el tratamiento sin indicación médica.
7. Cirrosis hepática
La cirrosis hepática es una inflamación crónica del hígado, que puede surgir debido al consumo excesivo o frecuente de bebidas alcohólicas, hepatitis B o C, o incluso hígado graso.
Esta condición puede resultar en calambres en la pierna, que suelen ser intensos y ocurren con mayor frecuencia por la noche, durante el sueño.
Qué hacer: el tratamiento debe ser realizado bajo la orientación del hepatólogo e implica cambios en la dieta y el uso de medicamentos para controlar algunos de los síntomas. En casos más graves, puede ser necesaria una cirugía de trasplante de hígado. Vea cómo se realiza el tratamiento de la cirrosis hepática.
8. Hipotiroidismo
El hipotiroidismo no tratado puede causar alteraciones musculares, como debilidad muscular, especialmente en los muslos y hombros, además de dolor o calambres en la pierna.
Qué hacer: se debe seguir el tratamiento recomendado por el endocrinólogo, que generalmente incluye la levotiroxina para reponer las hormonas tiroideas. Vea cómo se realiza el tratamiento del hipotiroidismo.
9. Diabetes
La diabetes también puede causar calambres en la pierna, que pueden ocurrir debido a desequilibrios de electrolitos, hipoglucemia, neuropatía periférica o insuficiencia vascular.
Los calambres por diabetes suelen aparecer especialmente en las extremidades inferiores, siendo más común durante el sueño.
Qué hacer: el tratamiento de la diabetes debe realizarse bajo la orientación del endocrinólogo y generalmente implica cambios en la dieta, ejercicio físico y/o el uso de antidiabéticos orales o insulina. Conozca cómo debe ser la alimentación para la diabetes.
10. Insuficiencia venosa
La calambre en la pierna también puede ser causada por insuficiencia venosa, ya que en esta condición ocurre cuando hay un mal funcionamiento de las válvulas existentes en las venas de las piernas, lo que dificulta el retorno de la sangre de los miembros inferiores al corazón.
Esto dificulta la circulación sanguínea en las piernas y la oxigenación de los músculos, lo que resulta en calambres en las piernas, especialmente en la región de las pantorrillas.
Qué hacer: elevar las piernas por encima del nivel del corazón puede ayudar a aliviar la hinchazón y el malestar. Además, es importante perder peso y practicar actividad física regularmente. Sin embargo, es importante consultar a un cardiólogo o angiologista en caso de sospecha, ya que el uso de medias compresivas o incluso cirugía puede ser recomendado. Conozca otras causas de calambres.
Qué hacer
Para aliviar el calambre en la pierna, se recomienda realizar masajes y estiramientos en el músculo que está contraído.
Por ejemplo, cuando el calambre ocurre en la pantorrilla, se recomienda sentarse en el suelo con la pierna extendida y tirar de la punta del pie hacia el cuerpo, manteniendo esta posición durante aproximadamente 1 minuto. Vea otras opciones de estiramientos para aliviar el dolor del calambre.
Cuándo acudir al médico
Es importante consultar al médico general en las siguientes situaciones:
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Calambre que provoca un dolor muy intenso y que no mejora después de 10 minutos;
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Aparición de hinchazón y enrojecimiento en la pierna;
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Debilidad en el músculo después del calambre;
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Calambres que ocurren muchas veces en pocos días.
Además, si el calambre no está relacionado con ninguna causa como deshidratación o ejercicio físico intenso, también se aconseja consultar a un médico general para evaluar si hay deficiencia de algún mineral importante en el organismo o si está relacionado con alguna enfermedad
